martes, 29 de diciembre de 2009

Polillas

Actvalización: vn videillo qve envió Vera.



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Mi último sueño: veía a un insecto alado; algo así como una polilla coloreada de blanco y negro; muy bonito el animalillo, grande y vistoso. Poco después eran cinco, quince, cuarenta las polillas. Yo estaba en mi cama, ellas en la pared, luego en el piso. Me movía al recibidor y también ahí había; al principio, un solo montón, junto al librero. Distinguía que en una se definía claramente la forma de una espiral (¿alegoría del tiempo?). Ahí se tornaba desagradable. Empezaban a caerme en la espalda, a meterse por mi boca y asfixiarme. Regresaba a la recámara; había muchísimas. No me dejaban respirar. Desperté con un acceso asmático.



miércoles, 23 de diciembre de 2009

Ná de ná

Pues hasta ahora todo bien en Villahermosa. Este es uno de los períodos más activos y más productivos que he tenido nunca. Las cosas van saliendo bien y parecen regresar a su lugar, al lugar en el que estuvieron hace un poco más de dos años, antes de echarlo todo por la borda --abrón, con mis frases hechas/analogías marítimas--; es decir, empezando en este submundillo que, si se logra evadir el tufo a mamonería y posudez, puede ser muy gratificante, cómo no.

viernes, 18 de diciembre de 2009

Lejos, como estamos, sobrevuela una duda. Las circunstancias, los tiempos, le dan forma e imagen conforme lo pienso, hasta hacerla, a ratos, certeza ineluctable.

Mi corazón, cualquiera que sea la circunstancia, está contigo. Yo, el yo concreto, el imbricado en esta realidad que nos domina, por otra parte, no sabría mi posición en este juego. Como sea, queda continuar, hacer lo mío, como desde el principio había planeado.

A ratos, también, viene a mi cabeza otra posibilidad. Que tú me digas "Nooo, ¿cómo crees?", de esa manera que tu tienes de hacer y decir las cosas. Que ambos nos riamos buenamente de todo esto, que sea un disparate. El alivio que sentiría si así fuera.

La duda, entonces, persistirá hasta el encuentro, me parece.

Te abrazo y beso.

martes, 15 de diciembre de 2009

Tantas cosas

1) Como en todo lo demás, cuando uno deja de hacer algo, resulta cada vez más difícil retomarlo. Así me ha pasado cuando, por ejemplo, dejo de leer, de tocar, de escribir, de hacer ejercicio o de llamar a mi papá... Y, bueh, no he escrito nada nuevo para el blog desde el 22 de septiembre... pero qué buenas rolitas, ¿qué, no?

2) Se me pasó postear en mi cumpleaños; como en el anterior, nomás pondría el número. ¿Qué más da? Tarde, pero seguro.

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3) Que el final del año se acerca a gran velocidad, que apenas he arrancado de nuevo con la tesis y que apenas ahora me siento despejado y listo para seguir, aunque aún tenga algunas cosas en Minatitlán T____T.... En fin. Not my fault.

4)

[Borges: Ríos Patrón]"le dijo a María Esther que la pelea entre ellos era absurda, que debían casarse. María Esther le contestó que no, que la ruptura era definitiva. 'Entonces no te voy a molestar más', dijo él, sacó el revólver y se descerrajó un tiro. Esto es el arranque de mal humor de un muchacho vanidoso, presuntuoso, desagradable. Hasta el suicidio de las personas superficiales es superficial". Bioy: "Era tan flaquito y frágil y loquito el muchacho, que el aspecto histriónico de este suicidio me impresiona. Parece el suicidio de un fantoche". (Adolfo Bioy Casares, Borges, p.359).

Hablando de Ríos Patrón, Mariana Grondona dijo: "Cómo la quería, que se mató por ella".Borges: "Cómo la odiaba, que se mató por ella. Qué bruto. Es como si le hubiera dicho: "¿Ves? Te convierto en asesina, en un instante".  (Adolfo Bioy Casares, Borges, p.360).


Y nada, que este episodio del librote (ote) que leo sobre Borges me ha recordado a mí mismo y a la máscara que llevé por tantos años. Al final, por suerte (para mi familia, por lo menos), yo siempre me quise demasiado y mi vanidad y presunción acaso actuaron aquella vez a mi favor, o a favor de mi permanencia en el mundo. Qué ridícula hubiese resultado esa muerte. Sí: el suicidio de un fantoche.


5) 

"Al final pareció percibir nuestra común sustancia y hubo una palpitación en su mirada entre tímida y risueña que me hizo lanzar un silencioso gañido de felicidad". (Italo Calvino, Las cosmicómicas, tr. de Aurora Bernárdez, Planeta, p. 67)


Creo que nos he reconocido en estos personajes... Espero nuestro final sea diferente. Wanna see you.

martes, 8 de diciembre de 2009